Elixir de amor, 5 claves para su lectura

    Elixir de amor, 5 claves para su lectura

    ELIXIR DE AMOR, 5 CLAVES PARA SU LECTURA

    MAYO 13, 2021

    PAZ Y BIEN

    El lunes 10 de mayo tuve el placer de Presentar el libro de relatos El Elixir del Amor de mi buen amigo Miguel Ferrando. Bajo el paraguas del Ateneo Escurialense.

    Este es el video de la Presentación👉 https://ateneoescurialense.org/literatura/presentacion-del-libro-el-elixir-del-amor/

    A continuación expongo 5 claves para entrar en el libro con ganas, para disfrutar y encontrar como yo la respuesta a ¿Qué hay en esta lectura para mí?

    1º VOY A HABLAR PARA FUTUROS ESCRITORES

    Soy mentor de escritura desde el alma y cuando en un texto (novela, poesía, o cualquier otro género) trata este tema de la escritura, me parece significativo abordarlo.

    Esta Presentación voy la hago bajo las premisas de Betsabé (mujer o pareja del protagonista):

    Voy a intentar que sea ESPONTÁNEA, pero como dice en la pg.76

    “no quería confundir más la espontaneidad con el descuido, con la desidia”

    Me interesa decir a los posibles lectores que están planteándose escribir que reflexionen como Betsabé:

    “-¿Sabes Felix? Tendrías que escribir sobre tus técnicas de cultivo, ese estilo aleatorio, salvaje…, sería un éxito”

    El reto para el escritor es

    “mantener su espontaneidad”

    ¿Qué hacemos los que escribimos? Dice en la pag 76

    “la rentabilidad acabaría con todo”.

    ¿Ese, no crees, que es problema con el que lidiamos muchos aspirantes a escribir y publicar, a ser escritores?

    2º AHORA VAMOS A PASAR AL TEMA DEL AMOR...

    que es una clave más de este relato.

    Difiero en la concepción del amor/pareja que nos muestra “El elixir…”

    Yo abogo por una relación co-independiente y este relato nos muestra un modelo de dependencia (aunque alejado de ciertos tópicos que nos cuentan las novelas de amor y las canciones de moda).

    Hay un poema de Iliria (poemario del autor) que enmarcaría este relato, es el XXVI. La voz de los barrancos (pgs-58 y 59):

    Soy de la sustancia de los Dioses.

    ¿Eres pues un Dios?

    Soy un Dios y soy casi como tú,

    somos casi lo mismo, tan sutil es el manto divino.

    Quiero conocerte y caminar contigo.

    Yo quiero escuchar esa famosa voz de los barrancos

    y las veredas cóncavas,

    ese nuevo rumor de las noches de Iliria.

    Hoy callo, Dios, hoy quiero que me cuentes

    lo que cuentan los Dioses.

    Es lo mismo que cuentan los hombres ¡Canta!

    Necesito conocer, divino compañero;

    ¿Somos eternos? ¿Es mi destino

    una nada circular? ¿Como una onda que se pierde?

    Tú te sabes eterno. ¡Canta!

    Cantaré una canción de amor, lo que cantan los hombres.

    Qué hermoso perderte en el profundo cuerpo de tu amada.

    Qué trágico perderte en el profundo cuerpo de tu amada.

    Partir para volver a partir, amar para escapar.

    Recordar su mano, la tibia mano que arrugó el papel,

    cada dulce arruga se enreda en tu recuerdo,

    cada paso es un verso arrugado,

    cada nuevo horizonte mi alma que pregunta;

    ¿Qué verso he de escribir para ocultar mi huida?

    ¿Qué amor es ese amor que me aleja a gritos

    del dulcísimo cobijo de su corazón?

    Y cantar ya sólo para mí, para el olvido,

    para las aguas del arroyo que me escolta.

    Y escribir de amor como quien nada en su tímida corriente.

    Qué hermoso perderte en el profundo cuerpo de tu amada.

    Qué trágico perderte en el profundo cuerpo de tu amada.
    Me gusta el relato de Miguel Ferrando porque esperaba más costumbrismo y más Sorolla; y resulta que son los barrancos (de ahí el poema elegido) y paisajes que se alejan del tópico valenciano o levantino.

    ATENCIÓN, a lo que podría haber escrito el protagonista pero que años antes escribió el poeta Miguel: poema MUJER PAG-113. Es por no hacer spoiler, y pongo en boca de Betsabé o explica al personaje enamorado de Felix:

    Se apacigua la lluvia,

    todo el valle descansa en la humedad templada

    de los cuerpos.

    Como caminar por las venas de un gigante,

    los prados son de esponja,

    las ventoleras de espasmos.

    Amada Gaya,

    este mojado atardecer me pertenece,

    a mí y a la ilusión mujer de una vida húmeda,

    de amores viscosos, caricias lánguidas,

    de orgasmos como corolas de nenúfar,

    como gotas de aguamiel, que lentas resbalan, infinitas,

    como caricias desmayadas y suavísimas.

    El destello de este ocaso se descompone,

    eternidad, eternidad íntima, mujer.

    Acógeme en la negrura final, igual que un vientre,

    y rézale al ombligo, con mi nombre, suspira mujer,

    suspira como el tifón adolescente,

    cuando te busque, cuando me hunda,

    cuando me encierre para siempre

    en tu templada humedad de cuerpo.

    En tu laberinto, mujer.

    En tu laberinto de pétalos cayentes

    y esponjas de aguamiel.

    Cuando hablo de amor dependiente, contra el que he luchado desde que tomé conciencia de que otro tipo de amor/relación más maduro es posible; quiero mostrar cómo lo aborda el escritor en la novela:

    En pag-35 dice:

    “…la diferencia entre el amor y los asuntos cotidianos, son imposibles de compatibilizar en esta vida de hoy”

    Preguntémonos cómo hacemos cada uno para compatibilizar nuestro día a día y nuestra relación de pareja/amistad/paternidad-maternidad.

    El protagonista habla de que le duele que su pareja se haga como él: PAG-39:

    "-Ella ya no es lo mismo, y saberlo me mortifica, ya no es lo que fue, la amargura, la oscuridad, se contagian, es imposible vivir con alguien como yo sin volverte como él, ella cambió, dejó de ser lo que era, cambió su academia y su revista por una oficina de publicidad, dejó el baile, me odiaba, o me amaba más, demasiado, fue horrible ver cómo se transformaba, cómo se convertía en alguien como yo, a Betsabé no le sienta bien la gravedad."

    Me quedo con eso de que a Betsabé no le sienta bien la gravedad.

    Al leerlo me viene Kundera (y algunas imágenes de la película) y su novela “La insoportable levedad del ser”. Ha sido algo automático.

    En la nueva Era de Acuario vamos a tener consciencia de esa levedad, de lo aéreo de nuestro amor.

    Entiendo que el protagonista(Félix) no quiere que su mujer/pareja se vuelva grave, pesada.

    En la PG- 87 nos dice que

    "su amor tenía que volar como un globo aerostático y soltar amarras…."

    También nos dice que es un amor SINCERO Y MANIÁTICO, que es una expresión rompedora a nivel literario, como se dice “nos vuela la cabeza”. Bueno, al menos a mí.

    Si llegamos en un momento a comprender lo que les pasa a los personajes, qué son y porqué actúan o dicen lo que dicen, podremos entender (o no, jejeje) que según ellos tienen una relación SANA Y EQUILIBRADA. Querido lector, ya me lo contarás.

    En definitiva ¿Qué queremos o buscamos todos?, ese tipo de relación sana y equilibrada. A mí me cuesta ver que lo sea (en la novela), no está en mi paradigma de co-independiente. Pero es el mío, a ti te toca definir el tuyo.


    3º EL OTRO TEMA QUE QUIERO ABORDAR ES EL DE LA SOLEDAD

    ...presente en ambos relatos.

    Vivimos en una sociedad, y más en la post-pandemia, que ha experimentado la soledad más abrumadora. Menos mal que la tecnología (para quien la ha podido utilizar), las videollamadas, nos han facilitado permanecer cuerdos y con algo de contacto virtual.

    La novela “El Elixir del Amor” y el relato de “El Pozo de San Hipólito”, nos hablan de la SOLEDAD Y LOS SOLITARIOS.

    Parece, en un primer momento, que es negativa pero vas a descubrir en ambos textos de lo importante que es. El saber manejarla, disfrutarla, vivirla con consciencia.

    Quiero introducir este tema con otro poema de Iliria, el LV, pag-117: Imperio de alas (Diálogo entre Hipólito -que podría ser Felix- y un caminante -que podría ser Valentín “el Hurón”, protagonista del cuento.)

    Y Yo le dije;

    Todos vais a desaparecer cuando yo muera,

    cerraré los ojos y ya nada existirá.

    Nadie, ni vosotros, la Tierra acabará cuando yo acabe.


    Y el pobre ingenuo me creyó.

    Me regaló una mantita con agujero en el centro,

    como un poncho de hilo,

    caminaba a mi lado, fumaba una pipa de nogal,

    y dijo;


    Cuando yo muera todo se me descubrirá,

    y el mundo, de veras, conocerá quien fui,

    cavarán un pozo en el camino

    para señalar, por siempre, mi despedida.

    Será una fiesta mi muerte.


    ¿A dónde me acompañas?

    ¿Por qué me guías?

    Yo te alejo de mi aldea para que tu nada

    no tropiece con mi todo, cuando mueras.


    Vale, pero yo también quiero un pozo en el camino

    para señalar mi muerte.


    Y le dije después;

    Qué dulce es razonar como los pájaros,

    y obedecer como obedecen sus plumas,

    aletear, o mejor, dejarse convencer por el aire,

    con las alas abiertas, atravesar las nubes.

    Invocar a Dios como quien cambia de viento.

    Amar como mirar la llamarada rosa de los flamencos

    que levantan el vuelo por naciones, por imperios de alas.


    Se rebosa mi alma y tengo que cantar.

    Soy un loco que canta.

    Soy un muerto que comprende.


    Hermano, me dijo, eres un poeta demasiado melancólico,

    ven a cantar nuestra amistad, a dos voces,

    aligera tus versos y guarda tu tristeza de héroe

    para esa linda mujercita que te viene siguiendo.

    Vamos a tocar este tema de la Soledad.

    ¿No os ha pasado durante la pandemia y post-pandemia, no habéis dicho en algún momento?: PAG-41

    “-No aguanto la soledad, no soporto ni un solo día de soledad, no aguanto vivir de espaldas al mundo, a nuestra gente.”

    Pues este libro no sólo te permite interrogarte y sanar esta circunstancia. Cuando nos preguntamos ¿cuáles son los efectos de la soledad?

    "-La soledad te ha hecho muy silencioso, ya no tienes la misma alegría, te paras a mirar cualquier cosa y al final pareces olvidarte de lo que miras, de lo que tienes alrededor, no me explicas lo que te pasa, sólo estás tranquilo en tu gruta de obsesiones, en tus silencios, te sobra casi todo..."

    El miedo no se queda ahí, se extiende a la relación: (PAG 65)

    "...me inquieta la soledad y la compañía, me da miedo que cualquier detalle inesperado nos separe..."

    Bueno, ¿Cómo hablan de los protagonistas del relato de la SOLEDAD COMPARTIDA?: (PAG-153)

    "Era muy íntima aquella soledad compartida, el ruido nocturno, de viento o de mochuelos, acompasaba muy suavemente la música, era el recuerdo de los campos vivos, de que estaban a kilómetros de cualquier vecino. Acababan de beber su dosis vespertina de Haloperidol y sabían que ese rato, esas horas, eran las más delicadas para el recuerdo, para el recuerdo de su amor, porque no tenían que moverse, respiraban juntos, se adormilaban juntos escuchando la misma música, sujetando el mismo libro, repitiendo las mismas palabras...

    -Cariño te quiero como un loco, mi vida depende de ti -decía él-, te amo con un amor muy suave, como en un sueño, me parece que vivo siempre en un sueño de amor, ¿y tú?"

    En El Pozo de San Hipólito se describe a un solitario de manera magistral, desde mi punto de vista. Es brillante, no es de extrañar el Premio que dieron al autor en Milán.

    Aquí se ve cómo la soledad está ligada al agua: (PAG-175)

    "Si maldigo el agua de mi historia es porque a veces miente, sus reflejos me engañaron, cegaron mi esperanza y me obligaron a escribir todo esto que tengo que escribir."

    Y luego nos habla de cómo esa soledad se le ha pegado al chico, Valentín el Hurón: (PAGS-186 Y 187)

    "...al chico se le ha enterrado el instinto con tanta soledad.

    Ese día, después de comer, los cuatro filosofaron alrededor del fuego y llegaron a que no hay pena tan severa en este mundo como la pena de la soledad. Se sobrecogieron al pensar en los que vagan por el mundo sin pertenecer a nada ni nadie.

    Valentín meditó también, no iba a volver donde su hermano, su cabeza seguía a cincuenta y uatro metros de profundidad, fantaseaba con taladrar el subsuelo liriano con infinitas galerías en las que habitar magníficamente, y controlar al pueblo, lo pensaba con melancolía..."

    4º OTRO TEMA QUE ME HA TOCADO, PERSONALMENTE, ES EL QUE HACE REFERENCIA A LA RELACIÓN CON LA HIJA (TEMA PATERNOFILIAL).

    Sólo voy a pincharte un poco si estás en esa situación, porque tengas o no relación con tus hijos, si estás separado o separada, como yo.

    Te invito a que goces del capítulo IV porque hay conversaciones y reflexiones importantes entre Félix y su hija Rosario.

    Explica mucho de lo que viven y son los padres, y de como experimentan-vivencian la relación los hijos.

    Confieso que a mí me ha tocado porque tengo una relación, que se podría definir como difícil o inexistente, a día de hoy, y me ha permitido ver por dónde puede estar pasando ella. Este relato a respondido a eso que decía al comienzo de ¿qué es de lo mío? Me ha hecho parar y enfocarme, ver y empatizar. Gracias Miguel.

    Ahí lo dejo pero si hay algún lector con problemas de relación paterno-filial. Este capítulo es muy significativo.

    5º FINAL

    Creo que ya va siendo hora de dejar de hablar yo y como dice Miguel en una frase de este libro (en el Cuento del Pozo...):
    “SE DEJABAN ACONSEJAR POR SU SILENCIO”
    Cuando cerremos el libro, que engancha no como un betseller (gracias a dios) sino, como dice Pablo Luque en el Prólogo: (PAG-15)
    “la escritura de Miguel en este volumen nos resulte un caudal de vida desbordado; un torrente de pasión y deseo irrefrenables por acariciar el corazón de las cosas, a partir de una melodía de palabras que recuerdan la potencia de su canto."
    Dejémonos envolver por esa música, ese ruido del silencio en nuestro espacio de soledad compartida. Por cierto, sólo recomendar al autor y editor que muevan el libro por entidades que se ocupan de los enfermos mentales, sus familias y cuidadores. A mi humilde entender este libro es prescriptivo para poder empatizar con este colectivo. Tal vez me exceda con la comparación, pero hay libros que hablan del tema de la enfermedad y los enfermos (Thomas Man y su Montaña Mágica o Camilo José Cela y su Pabellón de reposo) y auguro que Miguel Ferrando con estos textos puede ser un referente. Acabo con esta estrofa del poema de Iliria, que Miguel Ferrando publicó en el 2012 (y del que yo hice esta reseña 👉https://www.escribirdesdeelalma.tk/2012/04/miguel-ferrando-iliria_11.html): La sonata del amor- PAG-68
    “Pero mañana escribiré a la sombra de un tilo y quizás reencuentre la enternecedora brisa del amor. Quizás mañana se alejen de mí los oprimidos monstruos, y mis malvados y mis víctimas sean de sustancias diversas, quizás ya mis inocentes tendrán siempre hermosos ojos negros y muy nobles almas en las que sumergirse y respirar."
    GRACIAS

    blog, blog de escritura Ubicación: Madrid, España

    Miguel Ángel Cervantes Almodóvar
    Miguel Ángel Cervantes Almodóvar

    Poeta y mentor de personas creativas bloqueadas y escritores