LA SEGUNDA PERSONA. COMENTARIO DE JOSÉ LUIS MARTÍNEZ VALERO.
Todo el libro es un homenaje a tus padres, hermosamente triste, trascendente. La mirilla por la que aspiras a comunicarte, permite ver el otro lado. Te acercas al silencio, ese otro lenguaje que alcanza el nivel supremo de la música. La música de las esferas.
Tiendo los brazos
hacia donde mi vista
no llega, y allí toco
un pedazo de tu alma.
Eres más lírico, aunque nunca abandonas el pensamiento, diría un distraído. ¿Cómo si pudiesen vivir separados?, como si el pescado seco fuese comparable al pez que vive bajo el agua y a veces se para a contemplar a los distraídos paseantes.
Son los muertos, ciegos
que necesitan de nuestro recuerdo
para cruzar ante la esfinge.